Seis mujeres de la Ciencia en Chubut

11 de Febrero, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.

En la Facultad Regional Chubut de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN – FRCh), el espacio de trabajo está ocupado mayoritariamente por mujeres, en diferentes lugares y con distintas funciones; una política de gestión que tiene a la igualdad y la equidad de género como una de sus premisas primordiales. En este día de celebración, la UTN pone en boca de seis mujeres, cómo es hacer ciencia en un ámbito que, hasta hace pocos años, era exclusivo de los hombres.

Con el fin de lograr el acceso y la participación plena y equitativa en la ciencia para las mujeres y las niñas, y además para lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió proclamar, en 2016, el día 11 de febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.

En UTN FRCh, trabajan una gran cantidad de mujeres: Decana y Vicedecana, Secretarias, Directoras de áreas, Docentes, Nodocentes, integrantes de equipos de gestión, investigadoras y becarias, entre otras.

La casa de estudios cuenta con tres grupos de investigación. Los tres dirigidos por mujeres: la Lic. Cecilia Castaños dirige el Grupo de Investigación y Desarrollo Tecnológico en Acuicultura y Pesca (GIDTAP), la Dra. Norma de Cristófaro dirige el Grupo de Investigación en Energía, Materiales y Sustentabilidad (GEMyS), y la Dra. Virginia Alonso Roldán dirige el Grupo de Investigación en Gestión, Desarrollo Territorial y Ambiente (GesDTA).

Ante la pregunta sobre qué les despertó el interés sobre la ciencia, comentan:

Virginia: Cuando estaba por terminar el secundario pensaba estudiar medicina pero me di cuenta que mi interés era comprender cómo funcionaba el cuerpo humano, en particular el cerebro (pero no quería atender pacientes), así que me decanté por la carrera de biología. Otra cosa que me interesaba era la virología y el control de enfermedades. Si hubiera seguido por ahí, con el COVID, ¡estaría en mi salsa! Muchas veces recordé esos tiempos durante la pandemia… Pero al comenzar a estudiar biología se me abrió un mundo muy amplio que estimuló mi curiosidad. ¡Y ese es el motor de la investigación científica! Luego me enamoré de ese mundo natural tan diverso y mi carrera en todos los aspectos que he investigado se desarrolló en el campo de la biología de la conservación.

Cecilia: Tomé conciencia de este interés por la ciencia cuando decidí estudiar biología. Siempre me interesó mucho encontrarle respuesta a las cosas, por qué pasaban determinadas cuestiones. En mi casa mis papás eran profesionales, ingeniero y bióloga, y el hecho de que me llevaban a sus lugares de trabajo, como al Museo de Ciencias Naturales de La Plata, tuvieron su influencia.

También reflexionaron sobre los desafíos que tienen por ser mujeres en el campo de la ciencia:

Norma: A pesar de que hoy en día las mujeres son numerosas entre el alumnado universitario y terminan sus estudios, en general, con mejores promedios que los de sus compañeros, ciertas ramas como la de nuestro grupo de Investigación y Desarrollo (GEMYS), la Ingeniería Electromecánica, se resisten aún a la participación femenina.  Pienso que un desafío que tenemos las mujeres es tratar de contribuir a eliminar barreras y creencias que atribuyen a la mujer su propia ausencia por una decisión personal.  En este sentido, para que haya más mujeres trabajando en el área de ciencia y técnica, tenemos además que mostrar sus logros.

Virginia: En principio, los desafíos de una mujer en ciencia son los mismos que los de un hombre. Se requiere mucha dedicación y concentración que son difíciles de conjugar con la vida familiar. ¡Ni te cuento cuando tenés un bebé pequeño y no dormís!. Pero para mí hay dos cuestiones particulares a las que nos enfrentamos las mujeres: la edad biológica para tener hijos coincide con las etapas más exigentes de la carrera científica; y la lactancia. Cómo en otras carreras las licencias por maternidad son insuficientes y en particular en ésta si no querés quedarte atrás, frecuentemente, una sigue trabajando aunque esté de licencia.

Cecilia: En el marco en el que nos encontramos, con el empoderamiento que está teniendo la mujer sobre sus derechos, en los últimos años, las cosas cambiaron mucho desde que empecé. En mi caso particular, no fui afectada con actitudes explícitas siendo mujer en la ciencia, pero sí de manera no expresa, todas las mujeres de la ciencia estuvimos afectadas en el marco de esta cultura machista global. Nosotras mismas tenemos que empezar a visualizar esas acciones en las cuales nos encontramos en desventajas. Podemos estar equiparados en lo que somos mujeres u hombres u otres, pero hay algo en lo que tenemos que seguir trabajando las mujeres en ciencia y es por poder ocupar cargos jerárquicos, de decisión, en determinados lugares de la ciencia, esos aún siguen siendo reservados para los varones.Tenemos que equiparar las oportunidades; ese es uno de los mayores desafíos.

A la consulta sobre qué mensaje les darían a niñas y jóvenes para motivar su interés en la ciencia, respondieron:

Norma: Quiero decir que, en la ciencia, la técnica y la investigación podemos encontrar herramientas para transitar mejor por el camino de cade une y de les otres por este planeta.

Virginia: ¡Uy qué difícil! En principio le diría que no importa qué intereses y sueños tengan, que pueden realizarlos si se lo proponen. No hay NADA que una mujer no pueda hacer (al menos desde sus capacidades) y si la sociedad o alguien piensa que no, simplemente insistan porque están equivocados. Cómo investigadora les diría que la ciencia es una manera muy interesante y estimulante de ver el mundo en el que queda mucho por descubrir, comprender y aprender para vivir mejor. Tuvimos una muestra con el desafío que nos planteó la pandemia, dónde hubo muchos interrogantes y la ciencia aportó mucho.

Cecilia: No abandonen el juego, que es algo que nos pasa a veces a las mujeres; los niños y adolescentes no lo abandonan nunca. Es una buena manera de continuar despertando inquietudes. Seguir jugando, aprendiendo y en el aprendizaje surgen las ganas de generar conocimiento. Esto es algo que cuando uno/a se apasiona la pasa muy bien.

De esos grupos de investigación, contamos con el testimonio de tres becarias: Heidi Oroquieta (becaria de investigación en GesTDA, Cristina Giménez (becaria en el grupo GIDTAP) y Karen Velázquez Velasco (becaria en el grupo GEMyS)

Ellas también respondieron a qué fue lo que las motivo para ser investigadoras:

Heidi: Lo que me motivo fue que en la carrera de LOI, no se habla mucho de investigación, y me pareció interesante para darle una vuelta de rosca a lo que venía aprendiendo.

Cristina: Me motivó querer reforzar y ampliar los conocimientos que había recibido durante la carrera (Tecnicatura Universitaria en Bromatología y Medio Ambiente). Me pareció interesante lo que se proponía específicamente en la investigación que solicité, y pude ser parte, referida la industria pesquera. Debo decir que la decisión fue muy acertada, disfrute mucho ser parte de este proyecto.

Karen: Por casualidad una amiga me mencionó sobre las generalidades de una beca de investigación de desalinización de agua de mar, me llamo la atención el tema, pues no solo trata de algo que afectaba directamente nuestra zona sino también es una de las tantas posibles soluciones a una problemática extendida en el mundo que parece agravarse como lo es la falta de agua dulce y quería ser parte.

En su mensaje para niñas y adolescentes, dijeron:

Heidi: Se tendría que incorporar la ciencia y la tecnología desde los primeros años de escolaridad, que los chicos puedan conocerla, se pueden hacer muchas cosas para concientizar, y fomentar el conocimiento de las futuras generaciones desde temprana edad y que tengamos una constancia en el tema.

Cristina: “Lo que conocemos es una gota, lo que no conocemos es un océano” es una frase de Isaac Newton, que a mí punto de vista motiva a tener esas ganas de aprender cosas nuevas, ese océano del cual habla y del que aún no se sabe nada. ¡Anímense! Es un camino maravilloso.

Karen: A la ciencia no hay que temerle, no es el monstruo que pensamos, al contrario, nos da las herramientas para entender nuestro entorno, nos facilita la vida y nos fomenta el criterio. La ciencia sorprende con lo básico, siempre tiene más que explorar y en el proceso de vivirla se encontrarán con que no la quieren abandonar.

La ciencia y la igualdad de género son vitales para el desarrollo de nuestra sociedad. Desde la FRCh de UTN abrazamos, fomentamos y seguiremos luchando hasta que no queden obstáculos para cada mujer que quiera hacer ciencia.