Publicación en revista científica internacional de artículo de investigadora y docente de la Facultad Regional Chubut de UTN

Se trata de Manuela Barisone, quien junto a dos colegas de España publicaron en la revista científica Energy Research & Social Science el artículo: “¿Qué tipo de combustibles son más probables de ser usados para cocinar y calefaccionar en hogares pobres en energía? Explorando la energía y la pobreza energética en Argentina”.

La integrante del Grupo de Investigación en Energías, Materiales y Sustentabilidad;  y docente de la carrera de Ingeniería Electromecánica de la Facultad Regional Chubut de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN – FRCh), Manuela Barisone, publicó en la edición 87 de una de las revistas científicas más importantes del mundo, un artículo referido al uso de combustibles en hogares de Argentina con pobreza energética monetaria.

Lo hizo junto a Mercedes Burguillo de la Facultad de Ciencias Económicas, Empresariales y Turismo de la Universidad de Alcalá de España y a Pedro Juez Martel de la Universidad Nacional de Educación a Distancia, también de España.

El artículo plantea que, si bien los países menos desarrollados pueden tener un problema de suministro de energía, este no es el caso en muchos países en desarrollo o emergentes. En ellos puede haber un problema de accesibilidad a la energía que está vinculado no a una insuficiencia de suministro de la misma sino, en un sentido más amplio, al uso de determinados tipos de combustibles o instalaciones a los que se enfrentan los hogares para satisfacer sus necesidades energéticas.

En este artículo, centrado en el caso de Argentina, se analiza la pobreza energética como un problema de asequibilidad y accesibilidad. Desde una perspectiva de asequibilidad, encontraron que el 27,7% de los hogares argentinos eran pobres en energía en el año analizado, noviembre 2017 a noviembre 2018. En este mismo año, desde una perspectiva de accesibilidad, el 35,9% de los hogares argentinos tenía un problema de accesibilidad energética para cocinar y el 23,4% para calefaccionarse.

Para completar el análisis de esta doble dimensión de la pobreza energética, se estimaron dos modelos logit para mostrar si el problema de la asequibilidad de los servicios energéticos puede explicar la elección de instalaciones energéticas o combustibles, indicando un problema de accesibilidad en su sentido más amplio.

En ese sentido, se encontró una relación positiva y significativa entre la pobreza energética monetaria y la elección de lo que llamaron instalaciones no modernas para cocinar y para calefaccionarse. Concretamente, si el hogar se caracteriza por la pobreza energética monetaria, la probabilidad de que utilice instalaciones no modernas para cocinar aumenta en un 76,24% y, para calefaccionarse, en un 50,36%.

Por tanto, este trabajo demuestra que es importante abordar la dimensión de la asequibilidad. Como se observa en el caso argentino, podría tratarse de un problema de asequibilidad energética lo que explique la dificultad de acceso a instalaciones energéticas modernas que enfrentan hogares en países en desarrollo o de un nivel de desarrollo medio.

Link al artículo completo:

https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2214629621005685